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El Oportunista: Capítulo 1

Capítulo 1

El presente

Soy Kim Jaejoong, y si amo algo, lo arranco de mi vida. No intencionalmente… tampoco no desintencionalmente. Veo a uno de ellos ahora; un sobreviviente de mí corrompido, agrio amor. Él está a unos cien metros de donde estoy parado, pasando por viejos discos.

Yunho. Su nombre rueda en mi cabeza como una bola de púas, abriendo sentimientos que hace mucho tiempo se habían convertido en cicatrices. Mi corazón trata de apretarlos de mi pecho y todo lo que puedo hacer es quedarme y observarlo. Han pasado tres años desde la última vez que lo vi. Sus palabras de despedida eran una advertencia de que me mantuviera lejos.

Inhalé pegajoso aire en mis pulmones y traté de controlar a mis descuidadas emociones. Quería ir hacia él. Quería ver el odio surgir en su cara. Estúpido. Empecé a irme y casi cruzo la calle a mi carro cuando los pies me fallaron. El fuerte cosquilleo de agitación se arrastraba hasta mis dedos. Apretando los puños marcho de nuevo a la ventana. Este es mi lado de la ciudad. ¿Cómo se atreve a mostrar su cara aquí?

Su cabeza se inclina sobre una caja de cartón de CD  y mientras se vuelve a mirar algo encima de su hombro, hecho un vistazo a su nariz. Mi corazón se aprieta. Todavía me encanta este chico. La realización me asusta. Pensé que lo había superado. Pensé que podía manejar algo como esto, un encuentro improvisado.

Había tenido terapia, había estado tres años para…

Superarlo.

Amargarme en mi culpa.

Pierdo el tiempo en mis emociones durante unos segundos más antes de darle la espalda a la tienda de música y a Yunho. No puedo hacerlo. No puedo volver a ese lugar oscuro. Mi pie se levanta un paso para bajar  a la acera cuando las nubes que han estado al acecho alrededor durante una semana de repente gimen como tuberías viejas.

Antes de dar dos pasos, la lluvia está asaltando el pavimento, empapando mi camisa blanca. Retrocedo de forma rápida y me apretujo debajo del toldo de la tienda de música. Me quedo mirando mi viejo Escarabajo a través de los hilos de la lluvia.

Sólo una pequeña carrera y estaré camino a casa. Una voz extraña interrumpe mi momento de escape. Retrocedo, sin estar seguro de que me hablaba.

—El cielo esta rojo de problemas.

Me volteo y encuentro a alguien parado justo detrás de mí. Está más cerca de lo que se considera socialmente aceptable. Hago un sonido de sorpresa en mi garganta, y subo las escaleras. Es al menos medio metro más alto que yo, todo musculo, aunque no en una manera atractiva. Sus manos cuelgan en un extraño ángulo con sus dedos tensos y separados.

Mis ojos se sienten atraídos por un lunar que se asienta como un objetivo en el centro de su frente.

— ¿Qué? — sacudo la cabeza, confundido. Trato de dar un vistazo por encima de su hombro para darle un vistazo a Yunho. ¿Sigue allí? ¿Debería entrar?

—Es una vieja superstición de marinero.

Bajo la mirada para ver sus ojos. Me parece familiar, y, mientras considero el decirle que se joda, trato de recordar donde lo había visto antes.

—Tengo una sombrilla. — El sostiene una cosa floral con un mango de plástico en forma de margarita —­. Puedo llevarte hasta tu carro.

Miro al cielo, que sí luce un rojo oscuro, y me estremezco. Quiero que me deje en paz y estoy a punto de decírselo, cuando pienso ¿Qué pasa si esto es una señal? ¡El cielo es de color rojo-lárgate-de-aquí!

Estudio mi dedo pulgar y considero su oferta. No soy una persona de presagios, pero él si tiene una manera de mantenerme seco.

—No gracias—dije. Volteo mi cabeza hacia la tienda detrás de mí, y me doy cuenta que ya había cambiado de parecer.

—Bien. Un huracán se acerca, pero como quieras. — Se encoge de hombros de nuevo y sale a la lluvia, sin abrir su sombrilla.

Quería que se fuera. Sus anchas curvas traseras contra el aguacero eran como una repisa para el resto de su cuerpo. Es verdaderamente enorme. En cuestión de segundos la lluvia lo había tragado y ya no podía ver su silueta. Lo conozco de algún lado, pero seguramente me acordaría de un tipo tan grande si lo hubiera conocido antes. Me dirijo de nuevo a la tienda. El letrero sobre la puerta. Miro más allá del vidrio y lo busco en los pasillos. Está justo donde lo dejé, con la cabeza todavía inclinada sobre lo que parece ser la sección de Reggae. Incluso desde donde estoy parado, distingo un ligero surco en su frente.

No puede decidirse. Me doy cuenta de lo que estoy haciendo y tiemblo. Ya no lo conozco. No puedo asumir lo que está pensando.

Quiero que alce la mirada y me vea, pero no lo hace. Ya no quiero estar al acecho debajo del toldo como un extraño. Me repongo, me sereno, y camino a través de la puerta. El aire acondicionado es hielo sobre mi piel húmeda y me estremezco. Veo un estante alto de pipas a mi izquierda, me paro detrás de él.

Lo espió a través de los listones en las estanterías. Tengo que hacer el encuentro de manera que se vea accidental.

En frente de mí, hay una pipa con la forma de la cabeza de Bob Marley. Miro en los ojos de vidrio de Bob y practico una cara de sorpresa. Estoy indignado por los niveles a los que me rebajo. Pellizcando mis mejillas por algo de color, salgo de mi escondite.

Aquí va todo.

Hago mi acercamiento. Sorpresivamente el no alza la mirada. El aire acondicionado hace un ruido cuando estoy a pocos metros de distancia. Alguien ha atado banderines verde lima a las rejillas de ventilación. A medida que comienzan a bailar, huelo algo, es el olor de Yunho, menta y naranjas.

Estoy lo suficientemente cerca. Su presencia en una habitación es como un impacto físico discordante. Para probar esto, veo mujeres, jóvenes y viejas, dándole vistazos, inclinándose hacia él. Todo el mundo se inclina ante Yunho.

Él esta encantadoramente inconsciente de ello. Es realmente irritante de ver.

Me pongo furtivamente a su lado y trato de alcanzar un CD. Yunho, ajeno a mi presencia se mueve por la línea alfabética de artistas. Trazo sus pasos y justo como me muevo unos metros detrás de él, su cuerpo se vuelve a mi dirección. Me congelo y hay un breve instante cuando tengo el impulso de correr. Presiono mis zapatos mientras sus ojos rastrean mi cara como si nunca la hubiese visto antes, y aterrizan en el rectángulo de plástico en mi mano. Y luego, después de tres años, oigo su voz.

— ¿Alguno es bueno?

Siento la conmoción correr de mi corazón a mis miembros y se establecen como plomo en mi estómago. Él sigue hablando con el mismo acento británico diluido que recuerdo, pero la dureza de lo que esperaba oír no está allí. Algo está mal.

—Mmm…

Me mira de nuevo a la cara y sus ojos tocan cada uno de mis rasgos como si los viera por primera vez.

— ¿Lo siento? No capté eso.

Mierda, mierda, mierda.

—Eh, están bien — digo, colocando el CD de nuevo en su hilera. Segundos de silencio pasaron. Decido que él está esperando a que hablara.

—No son tu estilo.

El lucia confuso.

— ¿No son mi estilo?

Asiento.

— ¿Cuál crees que es mi estilo? — Sus ojos se estaban burlando de mí y había un asomo de sonrisa en su boca.

Recorro mis ojos sobre su cara buscando por una pista a este juego al que está jugando. Él siempre ha sido muy bueno con las expresiones faciales, siempre correctas en el momento correcto. El luce plácido y solo remotamente interesado en mi respuesta. Me siento a salvo así que digo:

—Mmm, eres del tipo rock clásico… pero podría equivocarme. — La gente cambia.

— ¿Rock clásico? — repite, viendo mis labios. Tiemblo involuntariamente mientras un recuerdo de él viendo mis labios de esa manera viene a mí. ¿No fue con esa mirada que todo comenzó?

—Lo siento — dijo, dejando caer su mirada al piso —. Esto es extraño, pero yo… uhhh… no sé cuál es mi estilo. No tengo recuerdo de ello.

Lo miré con la boca abierta. ¿Esto es alguna clase de broma enferma? ¿Alguna manera de vengarse?

— ¿No me recuerdas? ¿Cómo podrías no recordarme?

Yunho corre su mano a través de la parte de atrás de su cuello, los músculos en sus brazos flexionándose.

—Perdí la memoria en un accidente. Suena ridículo lo sé. Pero, la verdad es… no tengo idea de lo que me gusta o me gustaba, supongo que debería decir. Lo siento. No sé por qué te estoy diciendo esto.

Se voltea para irse, probablemente porque mi cara está tan llena de sorpresa que lo puso incómodo. Se siente como si alguien hubiera pasado un machacador de papas en mi cerebro. Nada tiene sentido. Nada encaja. Yunho no sabe quién soy. ¡Yunho no sabe quién soy! Con cada paso, se dirige hacia la puerta y me vuelvo más desesperada. En algún lugar de mi cabeza oigo una voz gritando, ¡Detenlo!

—Espera — digo. Mi voz es apenas audible —. Espera… ¡Espera! — esta vez grito y varias personas se voltean para ver. Ignorándolos, me enfoco en la espalda de Yunho. Está casi en la puerta cuando se voltea a verme. ¡Piensa rápido, piensa rápido! Subiendo un dedo para indicarle que espere donde está, troto hasta la sección de rock clásico. Sólo toma unos minutos para encontrar lo que solía ser su CD favorito. Vuelvo tomándolo firmemente en mis manos, deteniéndome a unos metros de donde él se encontraba.

—Te gustará esto — digo, lanzándole la copia. Mi puntería es patética, pero lo atrapa con gracia y sonríe casi con tristeza.

Lo veo caminar a la caja, firmar su recibo de la tarjeta de crédito, y desaparecer de nuevo de mi vida.

Hola—Adiós.


¿Por qué no le dije quién era? Ahora es demasiado tarde y el momento para la honestidad ha pasado. Me quedo clavado en su rastro, el corazón latiendo lentamente en mi pecho mientras trato de procesar lo que ha sucedido. Él me olvidó.

11 comentarios:

  1. lo dicho interesante ahora me e quedado con la duda de que le a sucedido a yunho porque no recuerda a jae y el por que termino su relación si se be que jae todavía lo quiere pero yunho ni sabe que existía
    por favor de verdad no te demores en subir las historias las dejas muy interesantes y te desapareces mucho mucho tiempo y yo desespero por fa no demores estaré esperando cuídate y espero te encuentres bien bye

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  2. wow una nueva historia :) ademas se lee tan interesante...ansío continuar leyéndola.

    La perspectiva de Jae siendo una persona manipuladora que desea conseguir lo que perdió suena muy bien, ahora Jae tratará de conquistar a Yunho y claro, debe enterarse de que fue lo que le paso a Yunho para que lo olvidará.

    Estaré esperando las actualizaciones, bye.

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  3. *w* aww~~ ya me gustó !!
    Esta personalidad de jae me es nueva jeje pero me gusta 3:) que le paso a yunho?
    Ya quiero saber que hará jae para conquistar otra vez a Yunho
    gracias por compartir y es pero la actu *0*

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  4. *0* yunho de verdad habrá perdido la memoria o estará fingiendo?
    pobre jae que feo se debe sentir que no te reconozca la persona que amas :(
    ya quiero ver como jaejoong saca toda su artillería pesada para reconquistar de nuevo a yunho :3
    Gracias...!! ;)

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  5. Se ve que va a estar muy interesante la historia. Me intriga saber lo que le paso a Yunho realmente... No va a ser nada fácil reconquistarlo, pero se nota que Jae no va a rendirse tan pronto. Ya quiero saber lo que sucedió con ellos en el pasado...
    Muchas gracias por compartir!!! voy a esperar actualización con ansias *O*

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  6. omg que interesante e intrigante :3
    ya quiero leer el sgt capi n,n actualiza pronto ,,,,,,,

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  7. Se le bastante interesante, Yunho perdió la memoria en un accidente? Oh! Jae esta enamorado de el....
    Gracias

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  8. Ahhhhh se nota interesantisimo. Sigue la x favor

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  9. Esta historia es muy buena espero y la puedas continuar quiero saber que le paso a Yunho para acabar asi a pesar que no me gustan las historias tristes esta me parecio interesante

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  10. Perdio la memoria o.o en parte bien porq asi no recuerda lo malo q le haya hecho jae en el pasado

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  11. Pero que paso como es que perdió la memoria bueno si en un accidente pero como paso eso?? Y ahora >< wooo esta interesante seguiré leyendo

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