El puente:
Parte 2.
Podrían tener una
mejor visión del Shot si escuchan a Belanova con el tema CADA QUE mientras leen
Con la tristeza golpeado su cuerpo, camino al puente,
Jae lo esperaba con ese semblante de que nada lo corrompía, odiaba que el no sintiera
nada, odiaba que el único que sufriera en esta clase de amistad o amor solo
fuera el, deseaba ver el dolor de Jae en su rostro por no poder estar con el,
no importaba lo egoísta que sonara.
-¿Por qué no me lo dijiste? Sabes que me hubiera sido
más fácil comprender que la persona que amo estaba con alguien mas así podría
luchar, podría… ¡dios! Ni siquiera ahora puedo comprender lo que pasa, el que
no pueda tocarte me duele mucho Jae – cubrió su rostro con ambas manos
conteniendo el llanto.
-quisiera decirte que lo se – bajo la mirada – pero no
lo comprendo cuando estaba vivo podía tener cualquier sentimiento ahora son
como simples recuerdos, perdóname.
-no tengo porque hacerlo – se sentó en el suelo del
puente, recargando su espalda en el barandal de este – tu no tienes la culpa de
que no estés… vivo, lo trágico es que si no estuvieras así, no te hubiera
conocido ¿cierto?
-tal vez – se sentó a su lado, inmune a cualquier
sentimiento, Yunho quería penetrar en su mente tan solo un segundo.
-¿fue tan duro para ti? – arriesgo a preguntar, sabia
que lo era, quien no sufriría cuando te han lastimado de esa forma.
-¿que? – pero el sin embargo pareció no comprender, o
simplemente no quería hacerlo.
-que ese hombre te lastimara – lo dijo con rabia en el
tono, deseaba tenerlo enfrente, un deseo imposible.
-no solo fue eso – Yunho lo miro, Jae tomo un
semblante mas tranquilo, con mas paz, todo en el desconcertaba a Yunho, todo el
tiempo cuando no supo su verdadera condición le buscaba los porques a todo pero
ahora… veía lo diferente que era, lo real de la actitud fría de Jae.
-¿entonces? – Jae parecía mirar a la nada, Yunho
quería arrancarse el corazón en ese momento, para el ese ser de piel pálida
seguía siendo hermoso, no importaba lo muerto que este estuviera.
-él… - dudo – mis hermanos, mis padres creyeron que
solo estuve con el esa vez que me violo, desgraciadamente no fue así, lo cierto
es que ese hombre no me dejaba, amenazo muchas veces con quemar la casa donde
estas, con lastimar a mi familia si no accedía a… tu ya sabes… me rebaje a
cambiar mi cuerpo por tranquilidad para los que ame, pero el seguía
amenazándome, quizás tenia miedo de que yo lo dejara ¿Cómo iba hacerlo? Si su
acoso era constante, no sabia que pasaba por su enferma mente, un día me cito
en un hotel de muy mal aspecto era la primera vez que entraba a un lugar como
ese, fue solo,una diferencia de otras ocasiones donde era común que estuviera
rodeado de sus guardaespaldas, empezó a gritarme y amenazarme, que si yo lo
dejaba el entonces tendría que buscar un reemplazo, “Junsu” salió de sus labios
el nombre de mi hermano, eso no podía permitirlo no podía explicarte que sentí
porque ni siquiera en este momento lo se, entonces le dije que si lo tocaba se
olvidaba de mi que jamás volvería a verme….
-¿intentaste alguna vez denunciarlo?
-lo hice, pero era amigo de un hombre con alto poder
dentro de la policía, anotaron mi declaración, y se burlaron en mi cara – rio
extrañamente como si su sonrisa solo fuera una mueca – se burlaron en mi cara –
repitió – si quería justicia debía tomarla por mis propias manos mejor mi vida
que la de mi familia, aunque no quería llegar a eso, al menos no en ese
momento.
-entiendo, ¿Qué paso después de que te amenazara con
tu hermano?
-quiso detenerme cuando intente salir, aun lo pienso
no duele es un recuerdo extraño, pero el era mucho mas fuerte que yo, mas sin
embargo ese día quizás ya estaba escrito, por que lo empuje ni siquiera con
fuerza el retrocedió y se le doblo el pie cayo y su cabeza pego con la esquina
del mueble que estaba al lado de la cama, yo estaba asustado y al mismo tiempo
aliviado, que persona cruel era yo.
-no digas eso tu no tenias intención, además fue para
defenderte cualquier persona lo hubiera visto así – trato de consolar a Jae
pero el no estaba conmovido, así que desistió.
-lo vi caer convulsionándose y sangre debajo de su
cabeza empezó a manchar el piso era mucha, yo no pensé salí corriendo lo había
matado o al menos estaba muriendo no avise a nadie para que lo ayudara desee
que muriera, y sin pensarlo sin dudarlo, ya que mi cuerpo estaba manchado y mi
alma estaba por hacerlo, decidí que eso no debía pasar me pare en este barandal
– señalo la parte exacta donde Yunho se había parado aquella noche donde se
conocieron, Yunho observo como si pudiera ver claramente lo que había pasado
aquel día con Jae – y a diferencia de ti, en cuanto estuve arriba, sin
pensarlo, sin siquiera dudarlo, salte – bajo la mirada como de quien reconoce
sus errores.
-hubiera querido estar allí para ti yo hubiera… - el
dolor se reflejaba hasta por los poros en el rostro de Yunho, pero… ¿él que
podía haber hecho? Estaba mas que claro que nada, porque cada quien busca su
destino, un destino que muchas veces no lo sufre el que se va… si no el que se
queda.
-igual lo hubiera hecho, yo no busque a nadie Yunho,
no me refugie en nadie, nadie pudo hacer nada por mi por mucho que me amara,
por que yo no lo permití. Me arroje de este puente pensando en que no me
merecía el perdón de nadie, no deseaba tampoco la compasión, solo quería que el
dolor se fuera, que todo terminara y aunque no lo hice de la manera correcta
para mí… todo termino.
-Mi Jae… - llevo su mano a sus labios sofocando el
sollozo que estaba por escapar, quizás Jae no sufrió, quizás Yunho sufría en
ese momento por los dos, porque tal vez cuando alguien ama es suficiente con el
sufrimiento de uno para los dos. Trato de recuperarse y pregunto – y… ¿como
terminaste ayudando…?
-no estoy muy seguro de ello, pero simplemente cuando
desperté me encontraba en lugar blanco tan blanco pero que no lastimaba la
vista, era una luz tan fuerte que no dejaba ver pero al mismo tiempo no cegaba,
un hombre que no pude ver nunca, me hablo, me daban una oportunidad para entrar
al cielo, cien años deben pasar para que el perdón llegue, ayudar a que los
demás no cometieran el mismo error que yo es mi tarea para ser perdonado, nunca
volverlos a ver, ni hablar de mi condición, eran las reglas, dos reglas
importantes.
-¿Por qué tanto tiempo?
-¿porque? Para mi el tiempo no ha pasado ¿no lo vez? –
cuestiono con una ternura que jamás había visto en él, o así quiso verlo, ya
que eso lo hacia sentir mejor – veo pasar el tiempo pero el no pasa por mi.
-amar… - trago la fuerte hiel que en ese instante era
su saliva – ¿el que no puedas amar es una regla?
-no puedo amar porque esos sentimientosdesparecieron
al morir como medida para no enfrentar dolor, no puedo hacerlo, no de la forma
que quieres que lo haga puedo amarte como un ser que tiene vida y que merece
ser amado, pero no ese tipo de amor que tu esperas de mi, puedo sentir dolor
por ti pero como el que siente una madre al ver sufrir a su hijo, pero no
deseo, ni ningún sentimiento de pareja que tu esperarías en mi, eso no puedo.
-¿Qué debo hacer esperar cien años? – dijo simulando
su dolor con tono sarcástico de su voz.
-probablemente – sonrió ligeramente, notaba demasiadas
expresiones en él, en ese momento – pero nadie podría mantener un amor tan puro
durante tanto tiempo, ni siquiera tu.
-sabes ¿que? – Yunho lo miro y Jae correspondió su
mirada – lo hare, te esperare ese tiempo puedo vivir ese tiempo, morir y
renacer contigo.
-no se si exista la reencarnación, y si la hubiera
tampoco se si nos encontraremos en otra vida, además debes vivir como todo
hombre normal antes de pensar en la muerte, debes casarte y tener hijos, esa
chica con la que vives podría ser la indicada, para ti.
-es que no quiero a nadie más que no seas tú, déjame
solo permanecer a tu lado, déjame amarte, deja que mi amor por ti me haga
vivir, no importa que tu no me ames, yo lo hare por los dos – Jae sonrió ante
la seguridad de Yunho.
-estaré aquí para ti siempre que lo necesites, te hice
una promesa y la cumpliré, pero no mas, porque se que me dejaras.
-¿tu que sabes? – se ofendió pero lo único que le
quedaba era demostrárselo, Yunho estaba seguro que no podía vivir sin ver el
rostro de Jae. Pero las promesas no siempre se pueden cumplir por mucha fuerza
de voluntad y amor que las soporten.
-lo se – dijo como si fuera una frase al viento.
-yo te prometo esto… yo prometo que viviré por ti, para
ti, lo juro.
Yunho a pesar del dolor que le causaba que Jae no
pudiera compartir la vida junto a el, deseaba ser merecedor de estar a su lado,
no sabia si lo lograría pero viviría por el amor que sentía, porque no
importara que pasaran años su amor no desaparecería.
Diez años pasaron desde que cada uno le hizo la
promesa al otro, Yunho tenia veintisiete años, la madurez en su cuerpo era
notoria era un adulto varonil y demasiado atractivo, Jae seguía siendo el
mismo, siempre hermoso, siempre joven.
El hace cinco años se había casado con Boa, no tenia
hijos, un año atrás el descubrió que era estéril, pero no lo comento con su
esposa no porque no quisiera, era que no le había tomado la importancia que
debía, si ella lo amaba no le importaría, porque el amor no condiciona.
No hubo un solo día que faltara a ver a Jae, siempre
que iba platicaban horas, de lo que fuera, llegaba en la tarde y se iba por la
noche, aun así para el era tan corto el tiempo al estar a su lado.
Podrían tener una
mejor visión del Shot si escuchan a Bruno Mars con el tema TALKING TO THE MOON
mientras leen desde aquí, por supuesto.
Otra década paso, treintaisiete años, eran los que a
Yunho ya le pesaban no porque odiara la vejez si no que era cada día más
difícil ocultar su físico, estaba enamorado de un niño, que no podía tener, que
nunca tuvo.
Su divorcio con boa fue necesario la mujer resulto
embarazada, y de el era imposible cuando se lo dijo ella suplico perdón pero
para Yunho no había nada que perdonar, no la odiaba le agradeció aquello porque
pudo ser libre.
Había decidido que aquella tarde seria la ultima que
iría a ver a Jae, no volvería mas, quería que ese hermoso adolescente lo
recordara por lo menos a esa edad, si bien desde que cumplió los treinta no
quiso ir otra vez al puentesu amor y su debilidadpor verlo siempre ganaba pero
esta vez estaba decidido, no se lo diría a Jae pero sabia que el presentía. Por
eso observo cada detalle de su rostro, cada detalle de su cuerpo, escucho su
voz atentamente, de todo aquello que se grabara en su mente, lo que nunca
podría borrar eran los sentimientos que por el sentía.
-adiós Yunho – le dijo, él sabía que esa seria la
última vez que estarían juntos, siempre supo que ese momento llegaría – vive
feliz, no me olvides nunca.
-nunca lo hare – dijo en hilo de voz, no quería
hacerlo, no quería dejarlo, pero después de todo la promesa no podía cumplirla,
así que dijo… - porque te amo.
Y esa fue su despedida sin abrazos, sin besos, pero
las miradas lo fueron todo;esta era una despedida que era necesaria, para aquel
que estaba envejeciendo, para aquel que deseaba ser recordado, joven y fuerte,
aun siendo atractivo, aunque la tristeza lo consumiera. Para Jae parecía tan
fácil, y eso dolía mas, era como entregarle su amor a alguien sin corazón, quizás
así era.
Y los setenta mas siete llegaron como rio que no
detiene su paso, su piel mostraba arrugas, aun con esa edad era atractivo, pero
el tiempo pasaba, y la fuerza de su juventud añorada se acababa, pero sus
recuerdos su amor, estaba latente como el primer día que lo vio, su corazón
latía fuertemente al recordarlo, como si su cuerpo cada día mas acabado,
estuviera protegiéndolo de cualquier intruso, sus sentimientos se mantenían
intactos.
Sin en cambio treinta años mas pasaron lentos,
lastimeros, y el se encontraba en la cama de un asilo, el mismo que tiempo
atrás cuando joven lo acogió, el nunca había dejado de apoyar incluso se
convirtió en un a portador a esa casa, en la cual cuando el no pudo valerse por
si mismo lo recibió, su piel tenia arrugas, demasiadas como para notar que
muchos años atrás fue un hombre que con solo su andar enamoraba, su mente a
pesar de su edad seguía bien, recordaba todo, pero necesitaba la ayuda de un
respirador para vivir quizás el dolor de un amor jamás consumado era lo que
desmoronaba su cuerpo mas rápidamente, pero el sabia que había prometido que
viviría el tiempo necesario para encontrarse en otra vida, esta promesa si la
cumpliría.
Diez años mas llegaron y como si su cuerpo, junto a su
alma lo supieran cerró los ojos, y por fin después de tanto tiempo, descanso
para no despertar más.
En el puente aquel chico que por el los años no
pasaban sintió cuando Yunho murió, solo un suspiro emano de sus labios y el
viento paso llevándose como polvo la imagen de aquel adolescente de tés pálida,
su perdón había llegado.
Tiempo después
-te digo madre que no podre ir a esa comida, lo siento
pero no – un chico de piel morena, alto, demasiado atractivo y varonil, que
tenia cerca de veinte años caminaba por la calle saliendo del edificio donde se
encontraba su departamento, este hablaba por teléfono – si lo se pero no iré
tengo clase en la universidad…
Un chico que también caminaba por la misma calle que
el anterior pero en dirección contraria, mandaba un mensaje a su amigo, ambos
chocaron y sus celulares resbalaron de sus manos cayendo frente a cada uno.
-ah mi teléfono – se quejo el moreno.
-lo siento estaba distraído – y entonces lo vio un
chico de piel blanca, cabello negro, un poco mas bajo que el, pero de su misma
edad quizás un poco mas poco menos, y su corazón latió con fuerza como si
despertara de un largo sueño – perdóname – pedía, sus ojos no se apartaban de
su rostro, le parecía familiar.
- no discúlpame a mi, yo debí fijarme – se agacho para
tomar su teléfono sin quitar su vista de el chico y entonces noto que el hacia
lo mismo.
-bueno entonces, otro día veremos quien tuvo la culpa
ahora debo irme – sonrió pícaramente y el chico moreno… Yunho, casi se desmaya
de la emoción.
-espera como… -¿Cómo volveremos a vernos?, ¿Cómo te
llamas? Quiso preguntar pero solo basto un segundo de perplejidad para que el
chico ya se hubiera ido en un autobús, que el por estar en estado catatónico no
detuvo, recordó la llamada – bueno ¿mama?… - y reviso el aparato en sus manos,
el cual no era suyo, era idéntico por eso lo había confundido – creo que
después de todo volver a verte será posible.
Feliz como nunca en su vida lo había sido, subió a su
coche y se fue rumbo a la universidad, su día después de todo estaría lleno de
sorpresas. Y la historia de amor entre Yunho y Jae que creyeron tal vez nunca
iniciada, apenas comenzaba.
Es el término
del two-shot
Pero no de la
historia de amor, porque el amor verdadero se transforma más no tiene… Fin.
Nota: quería dejarlo tal cual, en
un two-shot Angst con final triste, tal vez lo logre o no, pero pensé si en la
vida real ellos no pueden estar juntos públicamente (porque se en sus corazones
sí), los fics son una forma de ver la relación más allá de lo que imaginamos
así que intente darle un término, con un historia inconclusa, pero feliz.
Espero les haya gustado, y muchas gracias lindas niñas por leer y mucho más por
comentar.
hermosooooooo!!!! T-----------T pensé por un momento q no iban a estar juntosss, pero al final nadie sabe lo q el destino les depara ah~~~ me encantooo!!! <3
ResponderEliminarTT,TT estoy llorando como una tonta
ResponderEliminarme conmovió tanto YunHo por favor tan lindo
Jae tanto dolor , que no lo siente èl lo termine sintiendo yo TT,TT
Escuchar "TALKING TO THE MOON " ya no es lo mismo TT.TT
Gracias por el fanfin !!!!!!!!!!!!
y agradezco a la chica que lo recomendó XD
Hola;
ResponderEliminarÉs lindo! És como los contos de fé,amor y esperanza que leamos las niños o veamos en los fin de años,y la mensaje puedese estar en la persepcion de cada un.
Bello,felicitaciones!
Un abrazo y matta ne.
Hanajima-san.
si antes pensaba que "talking to the moon" era para un amor que se había ido al cielo con esta historiaaaa...dios mio ahora lo creeré con mas ahincó...
ResponderEliminarme hizo llorar la manera en que terminaron y también creo que el amor de yunho hacia jae al mantenerse intacto y puro logro que jaejoong obtuviera el perdón
aprovecho y me disculpo porque tiene ratoteeee...que encontré tu pagina pero siempre por andar en otros rollos no me di la oportunidad de leer tus historias..esta en particular es muy hermosa, aunque ponga un nudo en la garganta por evitar llorar...
gracias por compartir tus historias.
TOT pasaron muchísimos años y al fin YunHo podrá expresarle su amor a Jaejoong...ambos lo merecen ya que han sufrido mucho.
ResponderEliminarmiles de gracias por compartir tan bello twoshot *-*
Me ha encantado...
ResponderEliminarEste fic me ha dado una mar de emociones...
Me puso tan triste el q YH dejara de ir al puente pero q viviera el tiempo necesario para reencontrarse con Jae me puso de cierta forma muy feliz..
Gracias por este twoshot tan hermoso
impresionante
ResponderEliminarel amor de ellos fue tan cruel
yunho siguio fiel su promesa y tuvo su premio <3
Esa promesa fue la única que no rompió que doloroso fue en esa vida pero pudieron encontrarse de nuevo en una nueva vida cosas del destino se volverán a encontrar ...
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